martes, septiembre 18, 2007

II

Me preguntas si te veo…
No,
Y tampoco vos me ves.
Tal vez finjamos
día a día
que es distinto,
para hacer de esto
algo más soportable,
menos solitario…

Me preguntas si te escucho…
No,
Y tampoco vos me oís.
Tal vez porque la comunicación no existe
porque intercambiamos monólogos
sumergidos en nuestra propia agonía;

pero tratamos:
de identificarnos,
compartir,
entendernos…

No hay comentarios.: